martes, 17 de agosto de 2010

Romance del moro que perdió la Alhama






JOAQUÍN DÍAZ 

Decir aquí Joaquín Díaz, a nivel musical, es semejante a decir Pete Seeger en Estados Unidos. En un tiempo en el que el régimen tenía secuestrado todo el folklore, de todas las regiones, Joaquín Díaz tuvo el coraje, a pesar de que le tildaran de reaccionario, de rescatar y reinterpretar el folklore castellano, mś propiamente de lo que hoy es Castilla y León y entonces Castilla la Vieja. Sus comienzos se centraban casi únicamente en la investigación, recuperación y fiel interpretación de las canciones tradicionales de Castilla, en un tiempo en el que la mayoría de los cantautores (a excepción de los cantautores vascos reunidos en torno a la figura de Laboa en el colectivo Ez Dok Amairu) rechazaban la tradición musical como vehículo de expresión musical, debido a la utilización del régimen del folklore. Él, junto a Ez Dok Amairu en el País Vasco, el Grup de Folk en Cataluña, y Los Sabandeños en Canarias, fueron los precursores de la elaboración de un estilo propio dentro de la canción de autor española.






ROMANCE DEL REY MORO QUE PERDIÓ ALHAMA

Paseábase el Rey moro por la ciudad de Granada
desde la puerta de Elvira hasta la de Vivarrambla.
-"¡Ay de mi Alhama!"

Cartas le fueron venidas que Alhama era ganada:
las cartas echó en el fuego y al mensajero matara.
-"¡Ay de mi Alhama!"

Descabalga de una mula, y en un caballo cabalga;
por el Zacatín arriba subido se había al Alhambra.
-"¡Ay de mi Alhama!"

Como en el Alhambra estuvo, al mismo punto mandaba
que se toquen sus trompetas, sus añafiles de plata.
-"¡Ay de mi Alhama!"

Y que las cajas de guerra apriesa toquen al arma,
porque lo oigan sus moros, los de la Vega y Granada.
-"¡Ay de mi Alhama!"

Los moros que el son oyeron que al sangriento Marte llama,
uno a uno y dos a dos juntado se ha gran batalla.
-"¡Ay de mi Alhama!"

Allí habló un moro viejo, de esta manera hablara:
-"¿Para qué nos llamas, Rey, para qué es esta llamada?"
-"¡Ay de mi Alhama!"

-"Habéis de saber, amigos, una nueva desdichada:
"que cristianos de braveza ya nos han ganado Alhama."
-"¡Ay de mi Alhama!"

Allí habló un Alfaquí de barba crecida y cana:
-"¡Bien se te emplea, buen Rey! ¡Buen Rey, bien se te
empleara!"
-"¡Ay de mi Alhama!"

-"Mataste los Bencerrajes, que eran la flor de Granada;
"cogiste los tomadizos de Córdoba la nombrada."
-"¡Ay de mi Alhama!"

-"Por eso mereces, Rey, una pena muy doblada;
"que te pierdas tú y el reino, y aquí se pierda Granada."
-"¡Ay de mi Alhama!"

1 comentario:

  1. Muy interesante Super H. Se refiere a Boabdil llorando por haber sido vencido y perdió así la ocupación de Granada y La Alahambra como se menciona en el libro de Washington Irving.

    Frank

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